lunes, 26 de abril de 2010

Una Buena Idea

Estimados amigos:

Aunque el terremoto ya va quedando atrás para muchos, para otros tantos todavía es presente. Mediante este blog, los invito a leer información sobre una iniciativa que buscar ayudar a muchas familias

Una gran amiga y su familia encontraron a 15 familias en Coliumo, que en realidad, son una. Son 12 hermanos con sus padres y familias nucleares. Todos vivían en esa localidad y trabajaban como pescadores. El terremoto los dejó con lo que tenían puesto, nada más. Lo ùnico que les quedó es la tierra, que era de su propiedad, pero la ola se llevó casas, botes, etc.; todo lo que habían comprado con esfuerzo de años. La idea es diseñar casas duraderas y seguras, para luego hacer un convenio con una empresa constructora que está vendiendo a menor precio 15 casas permanentes, no mediaguas, y que podrán habilitarse con servicios básicos. Por esta razón se ha diseñado un sitio Web (http://coliumo.vtrbandaancha.net/) para recibir aportes, donde también encontraran todas las entrevistas que les han hecho a las 15 familias junto con los avances que se han realizado.

Muchas gracias a todos. Si quieren reenviar la información, están invitados a hacerlo.


lunes, 12 de abril de 2010

Fondos Concursables: Participación Cultural y Visiones (Publicado en La Tercera On Line)

Hace unas semanas se conoció la propuesta de reasignar el 70 por ciento de los fondos concursables para restaurar el patrimonio dañado y destruido por el terremoto del 27 de febrero. Ante la preocupación de muchos artistas expresada en distintos medios, el ministro Luciano Cruz Coke, señaló que el presupuesto de los fondos no se tocaría. Lo que más llamó la atención fue el debate que provocó en diversas redes sociales (facebook, twitter) y las diversas cadenas de mails que se lanzaron contra la iniciativa señalada. Por otro lado, unos meses antes se publicó la Encuesta Nacional de Participación y Consumo Cultural 2009 del Consejo Nacional de La Cultura y las Artes, una radiografía de cómo nos comportamos los chilenos de acuerdo al tipo de acceso, la geografía y el nivel socioeconómico, entre otros aspectos. En vista de estos hechos, y revisando la encuesta, podemos proyectar hacia dónde debe ir el debate sobre los fondos y de qué manera estos pueden o deben focalizarse.

El estudio realizado del CNCA señala varios elementos positivos. Por ejemplo, el 67% de los chilenos considera que el acceso a la cultura hoy es más fácil que hace cinco años; el 85% cree tener mayor acceso que las generaciones anteriores; la percepción de infraestructura ha crecido; y la asistencia a disciplinas como la danza ha aumentado de un 14,7 a un 23,5 por ciento.

Sin embargo hay dos puntos reveladores, que al contraponerse plantean preocupación y desafíos. Por un lado está el tipo de acceso de la ciudadanía a espectáculos artísticos. De la cantidad de personas que asisten a espectáculos artísticos, se especifica la cantidad de gente que asistió de manera pagada y de forma gratuita. Poniendo hincapié en el acceso gratuito, se señala que en danza el 81% de las personas asistió de esta manera; en artes visuales, el 76,6%; en conciertos un 49,8%; en teatro, un 46,8%; y un 6% en cine. Por otro lado si uno mira el total de asistentes a espectáculos artísticos desde la perspectiva socioeconómica, ésta se divide de la siguiente manera:

Fuente: Encuesta Nacional de Participación y Consumo Cultural 2009

(http://www.adcultura.cl/images/docus/7_Encuesta_Consumo_Cultural_2009.pdf)


¿Qué nos revela lo anterior? Si uno piensa que los chilenos pertenecientes a los sectores D y E son el 39.1% y 17.5% de la población*, respectivamente, nos damos cuenta que la repartición del acceso sigue siendo muy inequitativa. Llama la atención la baja participación del sector E y D en teatro, conciertos y artes visuales, todas disciplinas que reciben constantes apoyos de los fondos, y cuya asistencia gratuita es bastante importante, lo que implica que no hay un obstáculo monetario que impida una mayor asistencia. Pero al parecer, la gente que a priori no podría pagar un espectáculo así, no es la que se ve mayormente beneficiada. ¿Qué ocurre? Las tesis son múltiples. ¿Falta de educación? ¿Poco interés? ¿Dificultad de transporte? ¿Falta de escenarios?

Es indudable que los fondos no son la única forma de financiamiento, pero sí la más importante, ya que el aporte del Estado representa alrededor del 98%* de la producción cultural. Si a esto le sumamos la reacción de los artistas ante la posibilidad de reasignación de los fondos, podemos inferir su gran importancia.

Uno de los grandes problemas es que los proyectos naces de los propios artistas, y no de instituciones que deben velar por la asistencia de los ciudadanos, como por ejemplo, las municipalidades. Si un grupo de artistas decide hacer una gira por comunas de pocos ingresos y riesgo social un año determinado, la posibilidad que esta iniciativa permanezca en el tiempo, depende en gran medida que este mismo grupo presente al año siguiente nuevamente un proyecto similar. El problema que se genera es la dificultad de mantener temporadas de largo plazo en sectores de menor ingreso y bienestar, utilizando esta manera de gestión. Las municipalidades descansan (en gran medida por que no tienen recursos ni el capital humano) en las iniciativas de proyectos de los artistas. ¿Y qué pasa si no hay ninguna? Mal que mal el Estado debe velar especialmente por quienes tienen menos. ¿Cómo se explica entonces, la baja participación de los sectores más desposeídos de la sociedad? ¿Están bien orientados los fondos?

De esta manera caemos en la otra gran interrogante. ¿Qué debe financiar el Estado? ¿Cuál es el rol de lo aportes privados? ¿Qué se debe subvencionar? ¿Qué tipo de arte? ¿Música popular, música clásica? ¿Arte clásico, arte de vanguardia? ¿Se debe poner énfasis en lo formativo, en la vanguardia o en lo tradicional? Son preguntas de difícil respuesta, que la maquinaria de los fondos concursables ha evitado que se respondan. En vista de que el Ministerio se encarga de juzgar los proyectos que son propuestos, no hay una visión a largo plazo sobre qué manifestaciones son las que deben orientarse. Pese a que uno de los puntos importantes en la evaluación es el grado de impacto social, se debe señalar que el criterio de medición de este factor también es relativo, de acuerdo al énfasis cualitativo o cuantitativo del proyecto. ¿Qué nos interesa? ¿Qué mucha gente participe? ¿Qué la propuesta contribuya en la formación aunque sea a un grupo minoritario?

¿Qué relación tiene con la polémica suscitada por la posible reasignación de los fondos concursables? La respuesta es que puso de manifiesto las diversas visiones que los participantes del proceso artístico tienen sobre estos. Para algunos, los fondos son un derecho ganado por el gremio artístico, ya que son dineros que deben ser distribuidos de acuerdo a la calidad de los proyectos y los artistas que los realizan, debido a que es el Estado el que debe garantizar la producción cultural. Otro sector señala que el rol social que juegan los fondos es fundamental en la medida que faciliten el acceso y democraticen la participación de la ciudadanía. Un tercer sector, señala que son subvenciones que deben ser orientadas a disciplinas no comerciales, vale decir, que no sean autofinanciables bajo los criterios del mercado, pero que son parte de la tradición humana y que deben ser conocidas por todos. ¿Es posible hacer una combinación de estas tres?

Este es el desafío para las autoridades. Preguntas que podrán ser respondidas a través de la nueva infraestructura, de la educación artística en los colegios, de los apoyos a la creación, del impulso a las donaciones privadas, etc., pero siempre con la meta de lograr democratizar el acceso a la cultura, uno de los grandes logros que señala el estudio del CNCA. Sin embargo, más temprano que tarde, el debate estará puesto sobre que visión de los fondos es la que debe imperar. Todos tenemos una postura propia, de acuerdo a nuestras experiencias, gustos y sobre todo, visiones del hombre y de la sociedad. ¿Cuál es la suya?


*Fuente: Ernesto Ottone Ramírez (Debate en Política Stereo)

*Fuente: Novomerc y Adimark

Publicado en La Tercera Online: